- La Fundación Colegio Médicos Las Palmas advierte a la población de las consecuencias del cambio climático para la salud
- Asma, paludismo, insuficiencia cardiaca, rinitis alérgica, dengue, cólera, desnutrición, enfermedad psiquiátrica, fiebre del Nilo… pueden aumentar por el cambio climático
- La Institución inicia una campaña de concienciación para la reducción de la huella de carbono en favor de la salud
- “Prácticamente todas las acciones humanas liberan CO2 a la atmósfera y el ámbito de la salud no está exento”
La Fundación del Colegio hace un serio llamamiento acerca de las repercusiones que el cambio climático tendrá sobre la salud humana. Inicia una campaña de largo recorrido dirigida a la población y a los médicos, con el lema Juega con el cambio climático… y ganarás enfermedades. Comprenderá, entre otras acciones, una jornada de divulgación para toda la ciudadanía con expertos en la materia, una campaña a centros educativos, concienciación de pautas a pacientes, y culminará con un gran encuentro al aire libre dirigido al público general y que se celebrará en otoño de 2021.
“No es el momento de atemorizar a la población, es hora de hacerles partícipes del gran cambio que ya está aquí. No tenemos opción, todos debemos actuar. Como ya adelantó la Organización Mundial de la Salud (OMS), el cambio climático provocará un aumento de enfermedades”, manifestó Pedro Cabrera, presidente de la Fundación Colegio de Médicos de Las Palmas.
“Algunos efectos del cambio climático son ya irreversibles”, advirtió Pedro Cabrera, “pero aún estamos a tiempo de suavizar otras consecuencias. Con sencillos gestos, todos, la ciudadanía y los médicos, se puede reducir la huella de carbono”, explicó.
"Es hora de hacer partícipes a la población del gran cambio que ya está aquí. Como ya adelantó la Organización Mundial de la Salud, el cambio climático provocará un aumento de enfermedades”
La OMS advierte que el aumento global de la temperatura está desplazando mosquitos y otros vectores de infecciones, hacia latitudes previamente exentas de enfermedades como la malaria, la meningo-encefalitis de la fiebre del Nilo, el dengue, la enfermedad de Lyme y otras enfermedades de carácter vírico. Como ejemplo la fiebre del Nilo, una enfermedad hasta ahora casi desconocida en España, ya se ha cobrado algunas víctimas en Sevilla.
Las partículas diésel incrementan enfermedades respiratorias como el asma y la rinitis alérgica. El impacto por catástrofes ambientales, por la degradación ambiental, la calidad del agua y olas de calor se relacionan con muertes por insuficiencia cardiaca, enfermedades diarreicas como el cólera e impacto en la salud mental.
Observando este escenario, “los médicos no podemos mirar para otro lado”, exclamó el presidente de la Fundación del Colegio , “hemos de encarar el cambio climático desde dos enfoques diferentes: desde nuestra capacidad individual para influir en el comportamiento humano y desde nuestra responsabilidad como colectivo contaminante”, analizó.
“Advertir a los pacientes contra el cambio climático es hacer medicina preventiva y una obligación ética de los médicos”
Los médicos, como colectivo, “tenemos que ser conscientes de cuánto contribuimos al cambio climático en nuestra labor diaria y cuánto podemos modificarla”, explicó Pedro Cabrera. Como figura profesional que además aconseja hábitos de vida saludables también podemos concienciar que nuestros actos cotidianos supongan una menor cantidad de huella de carbono, “como mover menos el coche para distancias cortas e ir más a pie, será eficaz para la salud al mismo tiempo que en la lucha contra el cambio climático”, sostuvo Pedro Cabrera.
La capilaridad y la permeabilidad social de la atención médica no tiene parangón. Ninguna actividad profesional imparte tantos consejos a diario como la profesión médica. “En nuestro país se dan millones de consejos médicos cada día y pocos consejos tienen el nivel de seguimiento que tiene el consejo médico”, explicó Marta León, secretaria general de la Fundación del Colegio. “Advertir a los pacientes contra el cambio climático es hacer medicina preventiva y una obligación ética de los médicos”, añadió.
Por otra parte, la medicina como sector productivo, contribuye en gran medida al cambio climático. La huella de carbono de los hospitales y de la industria farmacéutica siguen siendo muy altas. “Los médicos, como colectivo, estamos obligados a disminuirla eligiendo los fármacos que, a igualdad eficiencia, generen menos residuos y menor agresión medioambiental”, analizó Pedro Cabrera.
"Hemos de encarar el cambio climático desde dos enfoques diferentes: desde nuestra capacidad individual para influir en el comportamiento humano y desde nuestra responsabilidad como colectivo contaminante"
¿Qué es la huella de carbono?
La actividad humana y animal genera CO2 y otros gases que se liberan a la atmósfera, éstos, en exceso, propician y aceleran el efecto invernadero. Como consecuencia, las pautas y patrones climatológicos están cambiando, elevando la temperatura del planeta.
España tiene unas emisiones per cápita de 5,8 de toneladas métricas de CO2 al año, cuando la media mundial es de 4,9. Ir en coche, viajar en avión, encender una luz, cocinar, consumir agua corriente, tirar la basura, etcétera, prácticamente todas las actividades humanas generan CO2. “Y el ámbito de la salud no está exento. Si se reduce la liberación de dióxido de carbono, se frenará el cambio climático”, concluyó la secretaria general de la Fundación.